El pasado fin de semana, familiares y amigos acompañaron a la pequeña Allyson Rodríguez Soriano para que recibiera su primer sacramento de vida, el bautismo, frente al altar de la iglesia de Nuestra Señora del Carmen.
La ceremonia se llevó a cabo como lo estipula el protocolo religioso y ataviado con un hermoso ropón blanco, la hermosa Allyson atendió y cumplió todos los requerimientos para consagrarse como hija de Dios.
Los padres de la pequeña, Karen y Wenceslao Rodríguez, muy orgullosos de su retoño eran partícipes del esperado acto, que conducirá a su hija por el correcto camino de la fe y, al mismo tiempo, agradecían a sus seres queridos el ser testigos del acontecimiento.
El sacerdote bendijo la vida de la pequeña Regina y la acción de sus padrinos, Luisana y Luis Rodríguez González, quienes a partir de ahora tienen la responsabilidad de guiar a su nueva ahijada con amor y responsabilidad por su camino religioso. RLGC