Ante posibles permisos irregulares otorgados a la familia Rosiñol Abreu por el proyecto inmobiliario “Buenavista”, dentro de un área de siete hectáreas de manglares protegidos por las leyes ambientales, los delegados de la SEMARNAT, Rocío Abreu Artiñano, y de la PROFEPA, Luis Enrique Mena Calderón, coincidieron en que se han avocado a las investigaciones pertinentes.
Ambos funcionarios federales señalaron como responsables a los anteriores delegados de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente y de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales.
Abreu Artiñano señaló que las autorizaciones para el proyecto fueron otorgadas por el exdelegado de la SEMARNAT en dos etapas y la tercera “no tiene ninguna solicitud de trámite”, mientras que Mena Calderón comentó que el tercer tramo fue clausurado y se encuentra turnado ante PGR para las investigaciones.
i REVIRA PÉREZ GÓMEZ
El extitular de la delegación de la SEMARNAT, Enrique Pérez Gómez, explicó que el proyecto “Buenavista” cumplió con toda la reglamentación del Plan de Desarrollo Urbano y reviró acusando al padre de Rocío Abreu que tiene un fraccionamiento sin permisos al lado del Country Club. I DSL/WM
Aseguró que “se dio con la aprobación de las autoridades del Municipio del Carmen, la aprobación de Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP), avaladas con opiniones técnicas; no se ha dado ningún permiso ilegal”.
Acusó que la actual delegada “en ocho meses no ha dado un solo reporte de lo que ella ha hecho, que la Delegación registra el 27% de efectividad, y además su papá tiene un fraccionamiento a lado del Country Club que no tiene permisos, eso sería mejor investigarlo”, concluyó. DSL/WM