Monterrey, N.L.— Las relaciones y tensiones entre el color y la historia de Alemania, en específico los campos de exterminio donde murieron millones de judíos durante la Segunda Guerra Mundial, se plasman en las obras de arte que integran la exposición Azul de Prusia, de Yishai Jusidman.
El Museo de Arte Contemporáneo (MARCO) será la sede de esta exposición del artista mexicano que estará abierta al público a partir del 27 de abril y hasta el 15 de septiembre próximo.
El nombre de la muestra, obedece a que fue precisamente, el Azul de Prusia, uno de los primeros pigmentos artificiales incorporados a la pintura europea y asociado a la historia de Alemania, en especial a los campos de exterminio.
Yishai Jusidman comentó, a través de una videollamada, que mediante la pintura, sus cuadros refieren sin distorsión subjetiva a fotografías de las cámaras de gas en los campos de concentración y exterminio donde fueron asesinados millones de judíos durante la Segunda Guerra Mundial.
Sin embargo, agregó, sus pinturas sorprenden con la ausencia de presencia humana porque su inclusión generaría en el espectador una empatía que le hace consciente del sufrimiento que vivieron en ese tiempo.
En contraste con la ausencia de personas, Azul de Prusia presenta únicamente el espacio vacío, por lo que el único testimonio que permite el artista, es el propio que se convierte en el protagonista que confronta esos espacios.
Precisó que su paleta se limita a tres materiales que tiene relación directa con el genocidio y que son pintura Azul de Prusia, Tierra diatomácea y Tonos carne.
Yishai Jusidman aprovechó en la Serie Azul de Prusia, la dualidad abstracción-figuración de la pintura, para afrontar la dificultad de la representación del holocausto en un ejercicio de contrapuntos. NOTIMEX